Declara en la Audiencia un niño de 13 años que quiere que le dejen vivir con su padre
La Voz de Galicia (Ourense)Martes, 4 de Octubre de 2005
El caso de Luis Alberto, un ejemplo de ezpeluznante maltrato infantil, cuyo objetivo es hacer que olvide a su padre, a lo que el menor se ha opuesto con todas sus fuerzas desde hace más de dos años y medio.
Más de un año después de que el caso de un niño de doce años que deseaba vivir con su padre tras la separación de sus progenitores saltara a la luz pública, continua abierto el proceso para establecer si, tal y como desea el niño, los jueces le permiten en un futuro residir junto a su padre.
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Más de un año después de que el caso de un niño de doce años que deseaba vivir con su padre tras la separación de sus progenitores saltara a la luz pública, continua abierto el proceso para establecer si, tal y como desea el niño, los jueces le permiten en un futuro residir junto a su padre.
Ayer el menor, que ahora tiene trece años, fue escuchado por varios magistrados de la Audiencia provincial en una sesión en la que también comparecieron fiscales y letrados.
Aunque el resultado de la sesión no se conocerá hasta dentro de algunos días, fuentes consultadas apuntaron a que durante su declaración el niño expresó a los magistrados de forma contundente su deseo de vivir con su padre.
Queda por saber si las partes consideran estas declaraciones suficientes para modificar el régimen de tutela que ahora mismo tiene el niño, que reside con su madre. Existen otras pruebas periciales que también se tendrán en cuenta.
El caso de este joven se dio a conocer cuando junto a sus compañeros de clase pegó cartas por toda la ciudad de Ourense en las que comentaba su deseo de vivir con su progenitor.
Ayer el menor, que ahora tiene trece años, fue escuchado por varios magistrados de la Audiencia provincial en una sesión en la que también comparecieron fiscales y letrados.
Aunque el resultado de la sesión no se conocerá hasta dentro de algunos días, fuentes consultadas apuntaron a que durante su declaración el niño expresó a los magistrados de forma contundente su deseo de vivir con su padre.
Queda por saber si las partes consideran estas declaraciones suficientes para modificar el régimen de tutela que ahora mismo tiene el niño, que reside con su madre. Existen otras pruebas periciales que también se tendrán en cuenta.
El caso de este joven se dio a conocer cuando junto a sus compañeros de clase pegó cartas por toda la ciudad de Ourense en las que comentaba su deseo de vivir con su progenitor.